Hoy soy la espada negra
sedienta, atenta, resuelta
buscando donde enterrar mi lengua de fuego.
Quiero hacer brotar todas las sangres
y vaciar su pulso en mi cuaderno
dándome otra vida en las letras.
Herir mi vientre semental
y fertilizar mis hojas con tus sueños.
Ahora que lo leiste
mi muerte cabalgará en tu espalda.
Mi espada apunta a tu boca.
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